Hace poco nos hemos mudado de vivienda, mis hijos humanos, mis peludhijos y yo, buenos y unos mil bultos y muebles…
Estamos de forma provisional mientras encontramos casa definitiva conviviendo en casa ajena, todos. Y digo todos porque en mi caso nunca nos planteamos ir sin los peludos.
Los que me conocéis sabéis que vivimos con Scoty y Pepa y ellos siempre siempre están en nuestros planes de vida, los míos y los de mis hijos humanos (otro día hablaré de los valores que los peludos aportan a los niños)
En algunas de los pisos que hemos visitado nos han dicho que en la comunidad los perros molestaban, en algunos alquileres que no admitían mascotas, en fin, se que es complicado a veces, pero a nosotros no nos verán por ahí eso lo tenemos claro.
A lo que iba hoy, a dar mi opinión sobre aquellas personas que cuando se mudan de casa por el motivo que sea y llegan a otra donde “no pueden quedarse con sus peludos” perdona??? JA JA JA
Me pregunto si también abandonarían a sus hijos humanos porque no admiten niños donde van…
En serio, pienso que todas esas personas que por este o por cualquier otro motivo abandona a sus peluditos es que no merecen que les hayan acompañado en sus vidas.
El abandono en cualquiera de sus modalidades no está justificado, entiendo que hay situaciones muy difíciles pero siempre hay una posibilidad de solución en la que el peludito no se sienta abandonado.
Me parece algo tan cruel…
Por no hablar de los que los atan a un árbol y se van o los que directamente los tiran a la carretera o a un cubo de basura…
Esas personas las quiero lejos de mi, muy lejos.
Vivimos en una sociedad donde aun los peludos son seres de segunda y eso me duele, pero si puedo aportar mi granito de arena para ir sumando puntos y lleguen a ser de primera bienvenido sea.
De momento a mi no me importa decir bien alto que mis perros son mis hijos, que sus partidas me han dolido tanto como la de mi padre y que “YO SI CONOZCO EL AMOR VERDADERO”
¿Y tu que opinas?